Comúnmente las uñas de las personas lucen en buen estado y por lo menos en el caso de las mujeres muchas de ellas son de admirar. Sin embargo, más que el hecho de ser para lucir, su estado puede ayudar a detectar algún tipo de enfermedad o alguna anomalía en el estado de salud.
Unas uñas muy delgadas, que se quiebren con facilidad, amarillentas o con rayas o que tiendan a deformarse pueden arrojar muestras de problemas o fallas nutricionales o aparición de patologías.
Por ejemplo, si alguna mujer pasa su etapa de la menopausia y aun a su edad las uñas se siguen quebrando con facilidad por ser muy frágiles, posiblemente puede estar siendo afectada por la osteoporosis.
La uña cuenta con la proteína de la queratina, mientras que el hueso tiene colágeno óseo cuando se registra una desmoralización de las uñas, es común que con el paso del tempo se presente una descalcificación ósea
La fractura de las mismas se puede presentar por falta de calcio o silicio lo que puede llevar a la persona a enfrentarse con enfermedades degenerativas como artritis y osteoporosis.
Uñas opacas o pálidas
Puede mostrar signos de anemia o malnutrición.
Uñas blancas
Problemas de salud como hepatitis
Uñas amarillas
Enfermedades como psoriasis, diabetes o tiroidea severa.
Uñas planas
Puede tratarse del síndrome de Raynaud.
Uñas con hendiduras
Podría ser Psoriasis o artritis inflamatoria.
Uñas muy amarillentas
Puede ser la causa de una infección por hongos o la enfermedad tiroidea.
Mira con regularidad su estado y cuídalas con la ayuda de un profesional en estética y ante cualquier signo que llame tu atención no dudes en buscar ayuda médica.