La tenosivitis es un tipo de artritis que genera engrosamiento de la capa que recubre los tendones de los dedos. Cuando se presenta esta enfermedad, se genera una condición denominada tenosinovitis estenosante o dedo en resorte/gatillo, la cual afecta el tejido blando de las manos generando ciertas protuberancias en la envoltura tendinosa debido al uso excesivo de esta articulación.
Para saber si padeces de esta condición, basta con flexionar los dedos en señal de puño, si el movimiento se frena a mitad del recorrido y luego se abre súbitamente como accionado por un resorte, quiere decir que padeces tenosivitis. En ocasiones, se requiere de ayuda de la otra mano para enderezar los dedos.
Los causantes de esta condición en los tendones están relacionados con algunos de los síndromes reumáticos más comunes en los tejidos blandos de la mano (artritis reumática, gota, psoriasis, enfermedades de la tiroides o una reacción medicamente adversa). También, se encuentran actividades recreativas o laborales que causan uso excesivo en las coyunturas y la tensión ejercida en los tejidos blandos debido a una articulación o hueso posicionado de manera incorrecta.
Los síntomas de esta condición se ven relacionados con dolor, inflamación o pequeñas protuberancias en la palma de la mano y dolor en la coyuntura media del dedo afectado, que se dobla en su base y en ocasiones puede atorarse en esa posición haciendo que repentinamente se libere; a raíz de este movimiento, su nombre “dedo en gatillo”.
Esta anomalía, en la mayoría de casos se presenta en personas que no han sufrido alguna condición reumática y comúnmente los síntomas desaparecen por si solos. Cuando no es así, se debe acudir al reumatólogo quien recetará descanso y uso de algún aparato ortopédico.
Los tratamientos para contrarrestar los síntomas de la tenosivitis son variados. Los más comunes tienen que ver con terapias de frío y calor. A continuación, te explicaremos de qué manera tratarlas.
Frío
Las compresas frías pueden ayudarte a reducir la inflamación inicial y el dolor de tendones en condiciones agudas (severas, pero de corta duración). La terapia fría es generalmente más efectiva durante las primeras 48 horas después de iniciada la inflamación. Los lineamientos para la terapia de frío son las siguientes:
- Usa un paquete frío, una bolsa con hielo o incluso una bolsa de verduras congeladas.
- Envuelve el paquete en una toalla si el frío te causa dolor.
- Coloca el paquete sobre el área afectada por 20 minutos, tres o cuatro veces al día.
- Frota un cubo de hielo sobre áreas adoloridas más pequeñas por menos tiempo.
Calor
Después de 48 horas de dolor crónico (a largo plazo), puede que el calor, seco o húmedo, te sea más benéfico que las compresas frías. Sigue los siguientes consejos:
- Utiliza un paquete caliente, una bolsa caliente o una toalla calentada en el microondas (asegúrate de que no esté tan caliente como para causarte quemaduras).
- Coloca un paquete caliente sobre el área sensible de 15-20 minutos, tres o cuatro veces al día.
- Jamás uses cremas analgésicas o ungüentos con las bolsas calientes porque la combinación puede quemarte la piel seriamente.
- Por último, date un baño o una ducha caliente.