Por: Redacción Artritis y Reumatología
Incluir dentro de la dieta diaria alimentos con ácidos grasos omega 3 o aceites de pescado puede retardar la pérdida muscular; provocada durante periodos prolongados de inmovilización. Así lo afirma un estudio realizado por un grupo de investigadores; departamento de Kinesiología de la Universidad McMaster, en Canadá.
Algunas enfermedades reumáticas como la artritis reumatoide pueden llegar a provocar la inmovilización de articulaciones como parte de su tratamiento; por lo que hay una pérdida muscular. Sin embargo, según el reciente estudio de la Universidad de McMaster dicha pérdida se podría retrasar.
Para el estudio los investigadores establecieron dos grupos de mujeres sanas, en un grupo se suministraba omega 3; y en el segundo grupo recibió suplementos de aceites de girasol. Luego de consumir este suplemento por cuatro semanas, a cada participante se le inmovilizó una de sus piernas durante dos semanas; y luego volvieron a sus actividades diarias.
Después de la inmovilización el grupo de investigadores midió el tamaño de los músculos de las piernas, su fuerza y masa; y pudieron establecer que la pérdida de músculo había sido significativamente menor en el grupo que había sido suplementado con omega 3 en comparación con el segundo grupo.
Para el grupo de investigadores este es un gran hallazgo. El cual ofrece una alternativa médica para evitar la pérdida muscular después de intervenciones como cirugías de reconstrucción. Por su parte, otros estudios han demostrado que las personas que incluyen este suplemento tienen un significativo aumento de la masa muscular; al combinarlo con un programa de ejercicio.