Conocidos también como trigger points más que puntos son áreas de un músculo que permanecen en constante contracción. Esto genera dolor y a veces, se acompaña de otros síntomas como mareo o migrañas.
Puntos dolorosos, nódulos, nudos musculares, basta hacer una búsqueda rápida para darse cuenta de las diferentes descripciones que se hacen de puntos de gatillo y estas dicen muchos del funcionamiento real de estos puntos dolorosos.
Un complejo sistema muscular
“Si miramos un músculo con un microscopio veremos que tiene, por poner un ejemplo 220.000 fibras musculares que dispuestas de una forma característica acaban formando ese músculo” dice Rafael Guerra, Presidente de la comisión de fisioterapia invasiva del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CPFCM).
Para que ese músculo se mueva un nervio transporta los impulsos eléctricos generados en el cerebro y cuando llega al músculo, ese nervio se divide en 200.000 axones, como si fueran las ramas de un árbol” prosigue “cada una de las ramas se conectan a una fibra muscular y esa unión entre axón y músculo es lo que se conoce como placa motora”.
El problema surge cuando un área de placas motoras se quedan contraídas de forma permanente, como si quisiera mover el músculo todo el rato.
“Cuando un músculo se contrae no lo hace en su totalidad a lo mejor esta contracción se da en un 18% del músculo, al siguiente movimiento ese 18% se relaja y se contrae otra parte y luego la otra parte y de esta manera el esfuerzo de va combinando” explica el fisioterapeuta.
Si una de las áreas de placas no se desconecta y se queda permanentemente contraída genera lo que se conoce como puntos de gatillo, pero que tal y como remarca el experto no son puntos , son áreas de placas motoras disfuncionales y pueden estar alojadas en cualquier parte del músculo donde haya inserciones nerviosas. Cuando se toca el área afectada, en muchos casos puede notarse una especie de nódulo.
“Antes pensábamos que el origen era un acortamiento de la musculatura, pero un grupo de investigación español, pionero en el estudio de los trigger points, ha descubierto que en las placas motoras disfuncionales se acumula una sustancia que retiene agua” destacan el especialista. Por tanto esta ligera inflamación en el músculo afectado podría deberse a ello.
El dolor a veces se nota en otra zona
La contracción constante de las placas acaba provocando un dolor conocido como miofascial que puede ser muy intenso, limitando incluso el movimiento del músculo afectado.
No es raro tampoco sentir dolor en otro músculo que muchas veces a simple vista no se relaciona con la zona de origen del punto gatillo. “Hay una hipótesis al respecto, no hay una explicación fidedigna del movimiento, es algo bastante complejo” concluye Guerra.
Lo que sí se ha encontrado es que hay algunos patrones comunes o zonas que parecen estar conectadas en lo referente a los trigger points y a cómo se irradia el dolor, aunque a nivel funcional no tienen porqué tener algo en común.
“También hay otra serie de patrones que todavía se desconocen y que vamos descubriendo en la práctica clínica” agrega el fisioterapeuta.
Además de dolor, los puntos de gatillo pueden generar otros síntomas como cansancio, debilidad , mareos, inestabilidad o migrañas.
Puntos gatillo : un Origen muy variado
Estas áreas dolorosas pueden formarse por un gran número de causas.
· Las hay directas, como darse un golpe en la zona o comprimirla de forma constante.
· Indirectas: pueden deberse a un problema de origen nervioso, articular, metabólico, visceral.
Por eso, para poder encontrar el origen y abordar el trastorno de forma adecuada es imprescindible hacer una correcta historia clínica, dice el experto.
La punción seca, muy eficaz
Para tratar los puntos gatillo se recomienda la punción seca es la técnica más adecuada. Esta consiste en la utilización de agujas que según dónde, cómo se clavan y qué movimiento se lleva a cabo durante el proceso, producen una especie de espasmo local en el área afectada por el punto gatillo.
Gracias a ello, se originan una serie de reacciones en la zona que favorecen que las placas motoras se relajen. “Los resultados, si la técnica se aplica bien, son espectaculares. A veces se resuelven problemas de años en una sola sesión” afirma el fisioterapeuta.
Para los músculos más profundos, incluso, se puede utilizar un ecógrafo para ver el área mientras se coloca la aguja. “ Esto permite saber con mucha más precisión el recorrido a seguir y se puede evitar nervios, vasos y arterias” comenta el experto.
Al contrario de lo que puede parecer en un primer momento, “ con la habilidad necesaria y con el uso de la ecografía cuando sea preciso, la punción seca puede no ser dolorosa y tremendamente efectiva” finaliza Guerra.