La presencia de determinados autoanticuerpos en las personas podría ser una pieza clave para la detección temprana de la artrosis de rodilla, así lo afirma una reciente investigación realizada por el Centro de Investigación del Cáncer (CIC), de la Universidad de Salamanca en España.
¿Qué es la osteoartritis de rodilla?
La osteoartritis de rodilla o también conocida como artrosis es una de las enfermedades reumáticas más comunes en la población a nivel mundial. Por lo general, suele manifestarse en adultos mayores y produce un alto grado de discapacidad debido al dolor, pérdida de funcionalidad y rigidez que genera.
Hasta el momento no existe una prueba de detección para esta patología, ni cura para la misma. Los especialistas realizan el diagnóstico de la osteoartritis de rodilla teniendo en cuenta la sintomatología del paciente y algunos exámenes; por su parte las opciones de tratamiento simplemente buscan controlar el dolor, pero no ralentizan la progresión de la enfermedad.
El trabajo investigativo analizó la situación clínica de más de 4.000 participantes; y posteriormente verificó los resultados de más de 300 integrantes que estaban en etapa inicial de artrosis de rodilla; y aún no tenían grandes daños en la articulación. Esto con el fin de establecer las formas en las que se manifiesta la enfermedad en sus primeras fases.
Durante la investigación se pudo evidenciar la presencia de seis tipos de anticuerpos totalmente diferentes, pero una cantidad mucho más elevada de anticuerpos MAT2β en los pacientes con artrosis de rodilla. Razón por la que los expertos decidieron evaluar el papel de los MAT2β en el desarrollo de la enfermedad.
Resultados
Luego de analizar la asociación entre este tipo de anticuerpos y la artrosis de rodilla y con los resultados obtenidos, los investigadores aseguran que la presencia de ciertos anticuerpos, especialmente de MAT2β estarían asociados al desarrollo de osteoartritis de rodilla y su posterior progresión con el paso del tiempo.
Este hallazgo del equipo de trabajo de la Universidad de Salamanca podría servir como un modelo para detectar la artrosis de rodilla de forma temprana mediante la medición de estos anticuerpos en suero sanguíneo, como lo hicieron en la investigación. La inclusión de este anticuerpo como un nuevo biomarcador permitiría una identificación más rápida de la patología y de esta forma ralentizar su evolución con un buen tratamiento.
