Antes de hablar sobre los beneficios de este alimento debemos aclarar algo, cacao no es lo mismo que chocolate negro; sus componentes cambian significativamente. El chocolate tiene gran cantidad de aditivos que reducen sus efectos beneficiosos para la salud.
El cacao es considerado actualmente como un superalimento debido a que tiene un gran aporte nutricional. Para aprovechar todas sus propiedades la mejor opción es consumirlo sin ningún aditivo de forma natural.
Dentro de sus componentes se encuentran: la fibra, vitaminas, hierro, fósforo, calcio polifenoles y agua.
Fortalece el sistema inmunológico
Es un alimento rico en antioxidantes, elementos que facilitan la acción de nuestro sistema inmunológico en el momento de encontrar algún agente infeccioso. Esto lo ayuda a mantenerse equilibrado y alerta para proteger el cuerpo, especialmente en personas con enfermedades inflamatorias.
Contiene propiedades antiinflamatorias
Este alimento contiene taninos y otros componentes que ayudan a reducir la inflamación provocada por los radicales libres. Además contiene vitamina D que actúa como antioxidante.
Previene enfermedades neurodegenerativas
Se ha logrado observar que el cacao natural logra aumentar el flujo sanguíneo que va al cerebro, lo que ayuda a reducir el deterioro cognitivo y el desarrollo de enfermedades como el alzhéimer. Esto debido a que los flavonoides protegen las neuronas.
Bueno para la piel
Los flavonoides también ayudan a proteger la piel del sol y las altas temperaturas. Además brinda elasticidad, mejora la textura de la piel y la hidrata. Es ideal para personas que padecen de enfermedades de la piel como la psoriasis.
Protege el corazón
Diversos estudios han establecido que el cacao logra reducir considerablemente los problemas del corazón. Y es que su consumo regular dilata los vasos sanguíneos, lo que ayuda a controlar la presión arterial y mejora el metabolismo de la glucosa.
Además, gracias a su alto contenido de vitamina D ayuda a fortalecer el sistema óseo, previniendo fracturas y el desarrollo de enfermedades como la osteoporosis. Es importante que antes de iniciar su consumo consultes con un especialista en nutrición, para que evalúe tu situación clínica y te indique la cantidad y periodicidad que puedes ingerir.