La muerte de las células inmunitarias llamadas macrófagos podría ser el causante del desarrollo de la artritis reumatoide, debido a que promueve la inflamación así lo afirma un reciente estudio en el que participaron investigadores de la Universidad de Colonia y Munich, Alemania; Universidad de Gante, Bélgica; Universidad de Tokio, Japón; Universidad Nacional y Kapodistríaca de Atenas, Grecia.
Los científicos lograron evidenciar que la inflamación característica de la artritis reumatoide se produce debido a la muerte de una serie de células inmunitarias; llamadas macrófagos. La muerte de estos sería provocada por necroptosis; un tipo de muerte celular que fomenta la inflamación.
“Además, en el estudio revelamos cómo el tipo particular de desaparición de los macrófagos da forma a la activación de los fibroblastos sinoviales, un tipo de célula clave que orquesta la destrucción del cartílago y el tejido óseo en la artritis reumatoide” aseguraron los investigadores.
Este estudio es de gran importancia, pues además de identificar el posible desencadenante de la artritis reumatoide; los investigadores lograron controlar la inflamación mediante la regulación de una proteína -A20-. Durante el trabajo investigativo se estableció que la A20 previene la muerte de los macrófagos, lo que ayuda a reducir la hinchazón.
Avances en el tratamiento
El reciente hallazgo podría controlar el desarrollo de la artritis mediante la reducción de muerte de macrófagos. Hasta el momento el estudio se realizó en roedores; pero los investigadores creen que este descubrimiento puede ser el inicio para empezar a desarrollar nuevas investigaciones en humanos.
Además, dicha información podría ser de gran utilidad para que el campo científico pueda desarrollar nuevos tratamientos; que permitan tratar enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide, previniendo el desarrollo de las mismas y complicaciones como la deformidad de las mismas. “Este es un hallazgo muy importante; ya que sugiere que los fármacos que inhiben la muerte celular podrían ser efectivos en el tratamiento de esta enfermedad” afirma el estudio.
