La cirugía artroscópica de rodilla es un procedimiento quirúrgico no invasivo, en el cual se utiliza una cámara diminuta para observar dentro de la rodilla y poder visualizar la articulación de manera completa.
Durante este procedimiento se hacen pequeñas incisiones para introducir el artroscopio y así poder realizar la cirugía.
Durante la cirugía artroscópica de rodilla se puede controlar el dolor de tres maneras:
Anestesia local
La rodilla se puede insensibilizar con medicamentos anestésicos y también se puede suministrar medicamentos al paciente para apaciguar los nervios y la ansiedad, sin embargo el paciente permanecerá despierto.
Anestesia raquídea
Se inyecta dentro de un espacio vertebral en la columna. No obstante el paciente estará despierto, pero no podrá sentir nada de la cintura hacia abajo.
Anestesia general o anestesia regional
Se canalizará al paciente en el quirófano para administrarle medicamentos, suero y anestesia, el paciente estará dormido profundamente y no sentirá ningún tipo de dolor.
Dentro de esta anestesia general también entra el bloqueo del nervio regional (bloqueo del canal femoral o aductor). Se trata de otro tipo de anestesia regional. La anestesia se inyecta alrededor del nervio en la ingle. Usted estará dormido durante la operación. Este tipo de anestesia bloqueará el dolor, de manera tal que se necesita menos anestesia general.
Cirugía artroscópica en proceso
Se puede colocar un dispositivo similar a un manguito alrededor del muslo para ayudar a controlar el sangrado durante el procedimiento.
El cirujano hará 2 o 3 pequeñas incisiones alrededor de la rodilla y se bombeará solución salina en su interior para inflarla. Se introducirá un tubo estrecho con una cámara diminuta en el extremo a través de una de las incisiones.
La cámara está conectada a un monitor de video lo cual le permite al cirujano ir viendo dentro de la rodilla del paciente.
El cirujano puede colocar otros instrumentos quirúrgicos pequeños dentro de la rodilla a través de las otras incisiones. Luego, reparará o eliminará el problema en la rodilla.
Al final de la cirugía se drenará la solución salina de la rodilla. El cirujano cerrará las incisiones con suturas (puntos de sutura) y las cubrirá con un apósito.
Candidatos para la cirugia artroscópica de rodilla
La artroscopia se puede recomendar en los siguientes casos:
- Un menisco roto
El menisco es el cartílago que protege el espacio entre los huesos de la rodilla. La cirugía se hace para repararlo o extirparlo.
- Un ligamento cruzado anterior (LCA) o ligamento cruzado posterior (LCP) dañados o rotos.
- Ligamento colateral roto o dañado.
- Inflamación o daño del revestimi ento de la articulación. Este revestimiento se denomina membrana sinovial.
- Rótula que está fuera de su posición.
- Pedazos pequeños de cartílago roto en la articulación de la rodilla.
- Extirpación del quiste de Baker. Esta es una hinchazón por detrás de la rodilla que se llena de líquido. Algunas veces, esto ocurre cuando hay hinchazón y dolor por otras causas, como la artritis.
- Reparación de un defecto en el cartílago.
- Algunas fracturas de los huesos de la rodilla.
Riesgos
En cuanto a la anestesia y la cirugía son
- Reacciones alérgicas a medicamentos
- Problemas respiratorios
- Sangrado
- Infección
Los riesgos adicionales de esta cirugía pueden incluir:
- Sangrado dentro de la articulación de la rodilla
- Daño al cartílago, los meniscos o los ligamentos en la rodilla
- Coágulo de sangre en la pierna
- Lesión a un vaso sanguíneo o a un nervio
- Infección en la articulación de la rodilla
- Rigidez de la rodilla
Preparación previa a la artroscopia de rodilla
- No debes beber ni comer nada durante 6 a 12 horas antes del procedimiento.
- Es necesario ingerir los medicamentos que te recetó tu médico con un sorbo pequeño de agua.
- Normalmente debes llevar un vendaje sobre el apósito que pusieron en tu rodilla.
- La mayoría de las personas puede irse a casa el mismo día de la cirugía.
- El médico te dará ejercicios para hacer, que puedes empezar después de la cirugía. Es posible que también te remitan con un fisioterapeuta.
Resultados de la artroscopia
La recuperación completa después de una artroscopia de rodilla dependerá del tipo de problema que el médico tuvo que intervenir.
Por ejemplo problemas como un menisco roto, un cartílago roto, un quiste de Baker y problemas con la membrana sinovial a menudo se reparan fácilmente. Muchas personas permanecen activas después de estas cirugías.
La recuperación de procedimientos simples es rápida en la mayoría de los casos. Sin embargo puedes necesitar muletas durante algún tiempo después de ciertos tipos de cirugía.
Tu médico también prescribirá los analgésicos que debes tomar durante la recuperación.