Por: Laura Mojica Ruiz
Redacción Artritis y Reumatología
Cada 3 de diciembre se conmemora el día internacional de las personas con discapacidad, más de mil millones de personas viven en todo el mundo con alguna forma de discapacidad; de ellas, casi 200 millones experimentan dificultades considerables en su funcionamiento, según estadísticas de la Organización Mundial de las Naciones Unidas (ONU).
La cifra de personas con discapacidad va en aumento, esto sucede debido a que gran parte de la población mundial está envejeciendo y estas personas son más propensas a sufrir de enfermedades que causan discapacidad. Existen algunos estigmas sobre la discapacidad, en muchas ocasiones se cree que son solo aquellas personas que están en silla de ruedas o muletas. Sin embargo la realidad dista mucho de esta creencia, la discapacidad afecta aproximadamente al 15% de la población mundial.
Las enfermedades reumáticas suelen ser enfermedades crónicas, que cuando no son tratadas a tiempo pueden llegar a causar rigidez y la pérdida de algunas funciones de las articulaciones del cuerpo. Según la ONU las enfermedades reumáticas son una de las primeras causantes de discapacidad. Algunas de las patologías más frecuentes son la artritis reumat oide, artrosis, fibromialgia, psoriasis.
Estas condiciones dificultan la realización de actividades cotidianas como apuntarse una camisa, coger objetos pequeños, subir o bajar escaleras. Además de afectar distintos órganos del cuerpo en casos donde la enfermedad ha avanzado de manera significativa, esto afecta seriamente la calidad de vida de los pacientes y la autonomía para realizar dichas actividades.
Aunque los síntomas varían dependiendo de la condición que padezca el paciente existen actividades como el ejercicio que ayuda a fortalecer y mejorar la movilidad de las articulaciones para evitar llegue a afectar la autonomía. En casos como la osteoporosis, realizar ejercicio desde edades tempranas puede ayudar a reducir la posibilidad de desarrollar esta enfermedad en el futuro, ya que trabajar con carga mecánica aumenta la densidad de masa ósea.
Además del tratamiento con fármacos y el ejercicio, mejorar los hábitos alimenticios e incluir algunos alimentos en tu dieta puede ayudar a disminuir la inflamación producida en la mayoría de casos de las enfermedades reumáticas. Conocer tu patología e identificar los factores que inciden la exacerbación de los síntomas ayudará a que puedas aprender a sobrellevar la enfermedad y de esta forma mejorar tu calidad de vida.