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¿Cómo aliviar el dolor de hombro?

¿Cómo aliviar el dolor de hombro?

Por: Redacción Artritis y Reumatología

La distensión muscular, el esguince de un ligamento, la dislocación de una articulación, la disfunción de la columna vertebral o incluso una enfermedad cardíaca pueden ser algunas de las causas del dolor de hombro. La mayoría de los dolores de hombro son autolimitantes y desaparecen después de algunos días. En el caso de las lesiones de hombro más graves, es necesaria la ayuda de un profesional, y en casos especiales, una intervención quirúrgica.

A continuación algunas recomendaciones para aliviar el dolor de hombro:

Descansa

En la ma yoría de los casos, la causa del dolor de hombro son los movimientos repetitivos o el levantamiento de objetos muy pesados. Por ello, es recomendable dejar de hacer actividades que provoquen el dolor. Si tu lesión de hombros se relaciona con el trabajo, pregúntale a tu jefe si puedes cambiar de actividades de forma temporal (a algo menos repetitivo o demandante) o cambiar de trabajo. Si la lesión se relaciona con el ejercicio, es posible que estés levantado pesas muy pesadas o entrenando mal. En ese caso, pídele orientación a un entrenador personal.

Es aconsejable descansar el hombro, pero no es recomendable inmovilizarlo por completo con un cabestrillo, en el caso de las lesiones de hombro menores, ya que puede favorecer al desarrollo de la condición llamada hombro congelado. Como mínimo, se necesitan movimientos suaves del hombro para fomentar la circulación sanguínea y estimular la recuperación.

Compresas de hielo

Aplica una compresa de hielo en el hombro. Si el hombro adolorido parece o se siente hinchado, pon una compresa de hielo en la zona más sensible para bajar la inflamación y adormecer el dolor. Deja la compresa de hielo por 15 minutos cada dos horas, hasta que disminuyan o desaparezcan los síntomas del dolor.

La terapia con hielo es mejor para las lesiones agudas que conllevan una inflamación. Siempre envuelve el hielo en una toalla delgada antes de aplicarlo en cualquier lesión para evitar la irritación y la congelación de la piel. Si no dispones de cubitos de hielo, usa una compresa de gel congelada o una bolsa de verduras del congelador.

Calor húmedo

Si el dolor de hombro es crónico (de larga duración) y lo sientes especialmente  temprano en la mañana o antes de ejercitarte, aplica calor húmedo en la zona donde se generan las molestias. El calor húmedo calienta los tejidos suaves (los músculos, los tendones y los ligamentos) y aumenta la circulación sanguínea hacia la zona, lo cual es útil para el dolor que provoca la osteoartritis o las viejas lesiones deportivas.

Algunas buenas fuentes de calor húmedo son las bolsas aptas para microondas, las hierbas o los aceites esenciales. Aplica el calor durante 15 a 20 minutos a primera hora de la mañana o antes de hacer ejercicio. Igualmente, darse un baño de agua tibia también proporciona calor húmedo.

Evita el calor seco de las almohadillas térmicas tradicionales debido a que puede deshidratar los tejidos suaves y aumentar el riesgo de lesionarse.

Estiramientos

Haz algunos estiramientos de hombro. La causa del dolor de hombro puede ser la rigidez o la contracción muscular, tal vez debido a la mala postura o a la falta de movimiento. Los estiramientos ligeros de hombro son beneficiosos, siempre y cuando no experimentes un dolor agudo, eléctrico o punzante al moverte. Los músculos adoloridos y contraídos responden bien al estiramiento gracias a que disminuye la tensión muscular, favorece la circulación sanguínea y mejora la flexibilidad.

La flexibilidad del hombro es esencial porque éste cuenta con el mayor rango de movimiento de cualquier articulación del cuerpo. Mantén los estiramientos de hombro durante 30 segundos mientras respiras profundamente y practícalos de 3 a 5 veces al día hasta que el dolor se atenúe.

Mientras estás parado o sentado, estira el brazo delante del torso y agarra el codo opuesto. Tira de la parte posterior del codo flexionado hacia el torso hasta que sientas un estiramiento en el hombro correspondiente.

Siempre en la posición de parado o sentado, pasa los brazos detrás de la espalda, trata de alcanzar el omóplato y entrelaza ambas manos. Baja lentamente la mano unida al hombro adolorido hasta sentir un estiramiento.

Busca ayuda profesional

Recibe un masaje de tejido profundo. Si el dolor de hombro persiste por más tiempo de lo que esperabas, considera recibir un masaje de tejido profundo de un terapeuta de masajes calificado. El masaje de tejido profundo se centra en la rigidez y tensión muscular crónica, la cual limita el movimiento, reduce la flexibilidad, dificulta la circulación sanguínea y promueve la inflamación.

Empieza con una sesión de 30 minutos centrándote en el hombro adolorido, pero también incluye la parte inferior del cuello y la parte media de la espalda entre los omóplatos.

Permite que el terapeuta avance hasta lo máximo que puedas tolerar sin sentirte incómodo. Hay muchas capas de músculos en el hombro a las que el terapeuta necesita acceder.

El masaje es más útil para la distensión muscular de leve a moderada, pero no es recomendable para las lesiones de las articulaciones más graves.

Otras recomendaciones
    • Para minimizar el dolor en el hombro, es posible que debas dormir boca arriba. En general, dormir boca abajo irrita las articulaciones del hombro y la parte inferior del cuello.
    • Para evitar dolores de hombros, no cargues bolsos que distribuyen el peso de forma irregular a lo largo de los hombros. Mejor, usa una mochila tradicional con correas bien acolchadas.
    • Si el dolor de hombros es intenso o debilitante y parece empeorar, visita a tu doctor.
    • Evita dormir de costado con los hombros tirados hacia adelante, ya que esto puede provocarte mucho dolor en el hombro durante la noche.
    • Duerme boca arriba y eleva el hombro con la ayuda de una almohada adicional cuya longitud vaya desde la mano hasta el hombro, aplica hielo y descansa hasta que el dolor desaparezca por completo para que no vuelva a inflamarse el músculo.