Es una de las lesiones más habituales en la práctica deportiva, pero puede producirse también por un golpe, una caída o un accidente. Dolor en la rodilla y haber notado un chasquido son algunos de los síntomas.
La rodilla es la articulación más grande del cuerpo y una de las más complejas ya que soporta la mayor parte del peso de una persona. De no ser por sus potentes y fuertes ligamentos, sería muy inestable. Sin ellos “bailaría”, es decir, no podría apoyarse en ella y no aguantaría el peso, se doblaría de lado.
Pero aunque sus ligamentos son muy resistentes, ante un traumatismo, ya sea en una caída, un accidente o por un mal gesto, estos pueden sufrir una rotura.
Tipo de lesiones en los ligamentos
La rodilla está asegurada por cuatro ligamentos:
– Los ligamentos cruzados anterior y posterior
– Ligamentos laterales interno y externo
La rotura de un ligamento puede ir desde una rotura leve o simple hasta una rotura completa, pasando por lesiones intermedias.
Generalmente, los especialista reconocen 3 grados:
1. Esguince
2. Rotura parcial
3. Rotura completa
El doctor Andrés Combalia Aleu, jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología (COT) del Hospital Clinic de Barcelona, explica cuales son las lesiones más frecuentes y cómo se producen.
“La lesión de rodilla más frecuente es la lesión aislada del ligamento colateral medial que es muy característica del esquí y de traumatismos leves, seguida de la lesión cruzado anterior frecuente en deporte como el fútbol y más raramente la de ligamento cruzado posterior más observadas en caídas” explica el experto.
Una lesión frecuente en el deporte
Este tipo de lesión es una de las más habituales entre jugadores de fútbol y baloncesto, cuyas rodillas están sometidas a sobreesfuerzo y cambios bruscos de dirección y de ritmo.
También se puede dar en los ciclistas debido a traumatismos por caídas y es una de las más frecuentes en la práctica de deportes de invierno como el esquí o el snowboard.
“La rodilla es el principal punto débil del esquiador” asegura el docto Andrés y afirma que hacer ejercicio para reforzar la musculatura de la zona es una de los mejores formas para evitar estas lesiones.
También es importante realizar ejercicios de calentamiento previos a la práctica deportiva y estiramiento al terminar.
Síntomas de una rotura de ligamento
Ante una lesión de una ligamento aislada se puede sentir:
– Dolor en el momento de la lesión y en los días sucesivos
– Se escucha un chasquido en la rodilla
– Inestabilidad en la articulación
– Dificultad para apoyar la pierna
– Si la lesión acontece sobre un ligamento cruzado, suele producirse una efusión de sangre o derrame en la articulación.
Cómo se hace el diagnóstico
Si se siente un dolor en la articulación que no cesa, es conveniente acudir al médico para que diagnostique si ha producido una lesión y de qué tipo.
El diagnóstico es en primer lugar clínico, el médico escuchará la narración de la lesión que ha tenido el paciente, junto con la exploración clínica de los puntos de dolor.