Según un estudio de la Universidad de Umea, Suecia, con 3 meses de dieta mediterránea ya se reduce la inflamación y el dolor en los enfermos de artritis. Sus efectos beneficiosos se deben a sus grasas buenas como el aceite de oliva, pescado azul y a la fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes que aportan frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos.
Numerosos estudios han demostrado el efecto anti- dolor de estos nutrientes, así que inclúyalos en sus menús.
Grasas omega 3 : este tipo de grasa que contienen el pescado azul, el marisco, las algas marina, las nueces, las semillas de chía y lino posee propiedades cardiovasculares, pero además:
– Reduzca las agujetas y el dolor muscular si practica deporte.
– Rebaja el dolor menstrual, así como el producido por procesos inflamatorios articulares, sobre todo artrosis y artritis reumatoide.
– Alivia el dolor crónico, un estudio en la Escuela de Medicina de la universidad de Yale, ha demostrado que actúa sobre la médula ósea, consiguiendo un efecto analgésico que combate el dolor crónico.
Ácido oleico, el aceite de Olivia es la principal fuente en la dieta y si es virgen extra, además de ácido oleico aporta vitamina E y polifenoles, todos ellos con propiedades antioxidantes y antiinf lamatorias, pero es que además, un estudio publicado en la revista Nature ha demostrado que actúa de forma parecida al ibuprofeno gracias al oleocantal, sustancia que frena las enzimas responsables de la inflamación. Úselo tanto en crudo como para cocinar y sustituya por aceite de oliva las mantequillas o margarinas.
Antioxidante, cuando la producción de radicales libres supera a la capacidad antioxidante del cuerpo, aumenta el riesgo de sufrir ciertas enfermedades y dolor crónico, pero varios estudios han probado que:
– A mayor consumo de antioxidante, menores niveles de marcadores inflamatorios, como por ejemplo la proteína C reactiva y por tanto menos episodios de dolor.
– Frutas y verduras son los alimentos más ricos en antioxidantes, tome 3 raciones de frutas al día y 2 de verduras una de ellas en crudo y se asegura la cantidad idónea.
La fibra en diferentes estudios epidemiológicos han demostrado que cuantos más cereales integrales se incluya en la dieta, menores niveles de inflamación y en consecuencia, menos dolor.
Todo gracias a su fibra que según un estudio de The Women’s Health Initiative, se asocia a menores marcadores inflamatorios. Por eso, es recomendable tomar al menos 3 porciones de cereales integrales a lo largo del día.