Pese a que el lupus no tiene cura y es una de las enfermedades autoinmunes más graves debido a sus manifestaciones clínicas, los científicos han desarrollado algunos tratamientos farmacológicos que permiten mejorar la calidad de vida de los pacientes que la padecen y controlar efectos adversos como la nefritis lúpica, una inflamación del riñón causada por el lupus eritematoso sistémico.
Para conocer sobre los tratamientos más efectivos para el lupus, el Dr. Oscar Soto Raíces, reumatólogo puertorriqueño, ahondó en las opciones más efectivas para esta condición reumatológica.
“El primer medicamento biológico para tratar lupus que es belimumab es un medicamento que bloquea un receptor particular de las células del sistema inmune y ha resultado ser un buen tratamiento para la mayoría de los síntomas de lupus porque no se estudió para pacientes con problemas de riñón. Lo usamos para otras manifestaciones pero no para riñón”, explicó el especialista.
Fármacos efectivos para los riñones de los pacientes con lupus
Como lo mencionó el Dr. Soto, el belimumab no beneficia a los riñones. Sin embargo, se han desarrollado otras opciones terapéuticas que atacan la nefritis lúpica y permite que la salud renal de quienes padecen el lupus no se vea afectada.
“Para riñón se han hecho avances con inmunosupresores como micofenolato que ayuda a controlar la nefritis lúpica que podría ser una de esas manifestaciones muy serias que tiene el lupus. También existen otros medicamentos biológicos que no necesariamente tienen una indicación para lupus, pero que los usamos porque hay ensayos clínicos que nos dicen que pueden ser beneficiosos. Uno de ellos, quizás el más utilizado, es Rituximab, que a pesar de que no tiene la indicación acá, pero se usa muchísimo, puede ser muy bueno y dar óptimos resultados”, ahondó el galeno Soto.
Inhibidores para otras condiciones reumatológicas
Los fármacos no son los únicos tratamientos que la ciencia médica ha desarrollado para ayudar a los pacientes con enfermedad reumática. Se han implementado algunos inhibidores que, como su nombre lo indican, inhiben partículas y proteínas involucradas en el desarrollo de estas enfermedades. El Dr. Soto Raíces explicó algunos:
“Se están estudiando mecanismos nuevos como por ejemplo los inhibidores de las cinasas de JAK que son una proteína en particular que inhibe al receptor de las proteínas de manera intracelular y las tenemos ya probadas y en el mercado para otras condiciones como artritis reumatoide y artritis psoriásica. Están reportando ya resultados positivos en algunos estudios que se han hecho de esta molécula, lo que llamamos hoy en día moléculas pequeñas que no son biológicos. (…) Hay varias otras moléculas o medicamentos que se están usando por ejemplo interferón para modular el sistema inmune que podría afectar de forma positiva o mejorar alguno de los síntomas de lupus”, puntualizó.
Según el Dr. Soto, lo más novedoso de los últimos tratamientos para el lupus son las moléculas pequeñas que modulan las moléculas o interfieren con otra proteína que ya con un tercero.
“Estamos empezando un protocolo o un ensayo clínico nuevo con interleuquina 2 que también es una proteína que se está estudiando como posible intervención para mejorar el lupus en general”, dijo el galeno.
Medicamentos que controlan todas las manifestaciones del lupus
Uno de los retos de estos medicamentos es encontrar efectivas dianas terapéuticas que ataquen las diversas manifestaciones físicas que el lupus podría desencadenar como problemas cardíacos, respiratorios y pulmonares.
“Lo que se busca es controlar el sistema inmune para que se autorregulen de forma tal que tenemos que sacar todos estos órganos, el corazón o el pulmón, la piel, las articulaciones. Lo que se trata de conseguir es una terapia que regule el sistema inmune para poder trabajar con todas estas manifestaciones a la vez. Esto es lo interesante y difícil de la condición: en un paciente puede que se manifieste en riñón y pulmón; en otros se va a manifestar articulaciones y piel, que son las manifestaciones más comunes”, dijo el reumatólogo.