Un estudio reciente, demuestra que el seguimiento del tratamiento de pacientes con lupus eritematoso sistémico (LES) es muy variable y está muy relacionado con las circunstancias vitales del paciente. En concreto, el estudio muestra que entre un 43% y un 75% de los pacientes presentan un buen seguimiento del tratamiento prescrito.
Uno de los datos más importantes que se pueden extraer de este estudio son las consecuencias de una mala adherencia o cumplimiento del tratamiento. En el caso del LES, la falta de adherencia se ha relacionado con mayor actividad de la enfermedad, es decir, mayor riesgo de presentar brotes. Esto da lugar a un mayor daño acumulado en los diferentes órganos (por ejemplo, en pacientes con afectación del riñón, la posibilidad de perder su función y requerir diálisis) y, por tanto, una peor calidad de vida. En los casos más graves puede provocar incluso la muerte del paciente.
Además, los pacientes con LES y falta de adherencia al tratamiento, presentan necesidad de más ingresos hospitalarios, más visitas a los servicios de urgencias, hospitales de día, más tratamientos, etc. En definitiva, esto produce más complicaciones que ponen en riesgo su salud y un aumento innecesario del gasto sanitario.
Uno de los grandes obstáculos para identificar y corregir los hábitos del paciente es que no reconozca que no se toma la medicación, o que no sigue la pauta prescrita por el profesional. Esta es una situación muy común que puede hacer que el personal médico crea que aquella medicación no es suficiente para controlar la enfermedad y, por tanto, añada o la cambie por otra más potente y probablemente con más efectos secundarios.
Para poner fin a estas complicaciones que dificultan un adecuado control de la enfermedad, se ha observado que, aunque es responsabilidad del paciente cumplir de forma adecuada el tratamiento prescrito, es beneficioso para una mayor comprensión y seguimiento de las pautas que el médico explique con detalle las razones de la elección del tratamiento. Tener en cuenta las preferencias y opiniones del paciente y establecer una relación bidireccional mejora de forma importante la adherencia al tratamiento.