Vivir con una enfermedad crónica como la artritis, provoca cambios físicos y emocionales que añade mayores retos en la vida diaria. Es normal que el paciente crea que ha perdido el control y el futuro le cause ansiedad. Contar con la información adecuada, el apoyo del personal médico, familiares y amigos y de manera positiva una actitud positiva puede ayudar a manejar la enfermedad donde el paciente lleve una vida plena y productiva.
Adaptarse a cambios y limitaciones
Sentir el dolor en las articulaciones hace que haya limitaciones de movimiento y esto puede abrumar al paciente realizando las tareas cotidianas pues llegan a ser más difíciles, también recordar tomar los medicamentos para la artritis regularmente y lidiar con los efectos colaterales puede llegar a ser estresante. El daño articular afecta la movilidad y podría ser necesario que la persona recurra a un bastón o una silla de ruedas y no solo esto en algunos casos la enfermedad es progresiva y las articulaciones afectadas pueden deformarse permanentemente.
Al manejar los efectos de la enfermedad día tras día puede presentarse emociones negativas como la frustración, tristeza y desesperación, para poder hacer un cambio de estas emociones la persona afectada tiene que hacerlo paso por paso, decidir qué actividades o responsabilidades son de mayor importancia para el paciente y la familia, teniendo en cuenta su plan de tratamiento. Esto ayudará a determinar cuáles puede efectuar y dónde puede requerir ayuda de otros, permitiendo fortalecer las debilidades con el tiempo. Los siguientes aspectos le ayudará a lidiar con la enfermedad:
· Hacer preguntas
· Llevar un registro de cómo se siente
· Encontrar apoyo
· Asumir una actitud positiva
· No renunciar a lo que le gusta
· Sentir orgullo por los logros o progreso
· Establecer metas nuevas
· Conectarse
· Compartir el diagnóstico con diferentes personas
· Planificar con tiempo
· Corregir mitos
· Escoger el momento adecuado
· Conocer el entorno
· Saber los derechos del paciente
Superar los retos de la vida cotidiana
Aunque las limitaciones físicas pueden crear nuevos retos en las actividades cotidianas, existen formas de ayudar el malestar y la fatiga.
En la cocina
· Considerar preparar alimentos en los días que el paciente se sienta bien, a fin de tener comida extra para ocasiones futuras. Hacer comidas de un solo platillo como guisados y estofados que satisfagan o complementen como sándwiches, barras de cereal o batidos.
· Emplear alimentos pre cortados o verduras y frutas pre congeladas. Comprar guarniciones que pueda se puedan meter al microondas, estos agregan variedad cuando el paciente solo tiene energía para cocinar una comida pequeña.
· Tener herramientas fáciles de usar para personas con artritis como procesadores de alimentos, batidora con base, abridor eléctrico y recipiente con fondo de plástico para una mayor estabilidad.
· Usar un tapete amortiguador en el piso para disminuir la presión en las articulaciones inferiores. Comprar un banco alto en el que la persona se pueda sentar para cortar alimentos o manipularlos frente a donde lo haga.
En el carro
· Colocar una base giratoria que le ayuda a entrar y salir del vehículo.
· Utilizar herramientas que ayuden al paciente con las diferentes cosas que tiene hacer en el carro como alcanzar el botón del combustible o el baúl.
· Tener una cinta aislante de las llaves del auto puede facilitar el girar las llaves al encender el carro.
· Cambiar el auto por uno que se acomode a las necesidades de los pacientes con artritis que tenga un volante pequeño, fácil de maniobrar, con encendido y controles mediante botones, en lugar de perillas.
Ir de compras
· Ir de compras durante las horas del día hará que la persona tenga más energía, si alguien puede acompañar a la persona le será de mucha ayuda.
· Pedir el favor a los empleados de la tienda que alcancen por usted los artículos más altos o bajos del estante. Considerar la entrega a domicilio es otra de las opciones.
· Desempacar los artículos perecederos primero, tomar un poco de tiempo y descansar para después seguir con lo que falta.
Es necesario que haga caso a las recomendaciones del especialista que le ayuda con su tratamiento, no olvidar los medicamentos y estar acompañado de los seres queridos.