Este es uno de los tres tipos de artritis más comunes que afecta a las personas mayores. Ataca principalmente al cartílago, el tejido que amortigua las terminaciones de los huesos en el interior de las articulaciones.
Afecta en la mayoría de los casos las manos y las articulaciones que soportan mucho peso como rodillas y caderas.
La artritis ósea se presenta cuando el cartílago comienza a deshacerse, desgastarse y deteriorarse. En algunos casos, todo el cartílago puede desgastarse entre los huesos de la articulación, haciendo que estos chocan entre sí. Los síntomas pueden ir desde el entumecimiento y un dolor moderado que se va y regresa, hasta un dolor imposible de soportar de la articulación.
La artritis ósea puede producir:
- Dolor en la articulación.
- Disminución en el movimiento de la articulación o invalidez.
Los científicos piensan que la artritis en las diferentes articulaciones puede tener diversas causas.
La artritis ósea de las manos o caderas puede tener origen familiar. La artritis ósea de las rodillas se vincula con el sobrepeso. Lesiones o un excesivo uso pueden ser la causa de la artritis ósea en las articulaciones de las rodillas, caderas o manos.
Para combatir sus síntomas, lo recomendable es tener periodos de descanso, practicar algún tipo de ejercicio, ingerir una dieta saludable y balanceada y usar correctamente las articulaciones son partes importantes de cualquier programa de tratamiento para la artritis.
Recuerda que el tratamiento es diferente para cada tipo de artritis y la cirugía es el único medio para reemplazar las articulaciones. Sin embargo, la manera cómo utilices tus articulaciones, por medio del descanso y el ejercicio y un peso adecuado, te ayudarán a controlar el dolor.