Redacción: Artritis y Reumatología
La artritis reumatoide es una enfermedad que produce inflamación en las articulaciones y algunos órganos del cuerpo como los pulmones, los ojos y el corazón. Sin embargo, esta inflamación también podría estar afectando el cerebro de los pacientes con artritis reumatoide, según un estudio realizado por el Centro de Investigación de Dolor Crónico y la Fatiga de la universidad de Michigan, Estados Unidos.
Esta enfermedad se caracteriza por generar dolor crónico, rigidez y deformidad de las articulaciones afectadas. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) una de cada diez personas padece de artritis reumatoide.
La investigación contó con 54 pacientes que padecen de artritis reumatoide, durante aproximadamente seis meses se analizaron los niveles de inflamación y si había alguna conexión con áreas del cerebro. Según los expertos se encontraron resultados en algunas áreas del cerebro que se conectaban a redes cerebrales.
“Los niveles más altos de inflamación están asociados con conexiones más positivas entre el lóbulo parietal inferior (LPI), la corteza prefrontal medial y las redes múltiples del cerebro, así como la materia gris del LIP reducido, y que estos patrones de conectividad predijeron fatiga, dolor y disfunción congnitiva” son algunas de las interpretaciones realizadas por los expertos del Centro de Investigación de dolor crónico y la fatiga.
“Todo esto nos ha mostrado que el cerebro no funciona de forma aislada y que la inflamación que observamos en la periferia puede estar alterando conexiones funcionales del cerebro y desempeñando un papel en algunos de los síntomas cognitivos que se producen en la artritis reumatoide” aseguran los científicos.
De esta manera el estudio concluyó que la inflamación presentada en pacientes con artritis reumatoide interfiere directamente con la forma en que funciona el cerebro y podría estar alterando sus funciones.
Se ha comprobado que la artritis reumatoide genera repercusiones en distintos órganos del cuerpo, además de causar inflamación y dolor de las articulaciones también provoca algunos daños en el sistema nervioso central, sistema nervioso periférico, problemas musculares.
La artritis reumatoide es más frecuente en mujeres y se presenta en personas entre los 35 y 50 años. Un diagnóstico temprano y factores como mantener un peso corporal adecuado, realizar ejercicio, evitar fumar pueden ayudar a prevenir complicaciones del cuadro clínico.