Por: Redacción Artritis y Reumatología
Ser diagnosticado con una enfermedad reumática como la artritis reumatoide puede generar múltiples interrogantes. Además, confusión e incluso miedo. Esto, debido a lo complejo que puede llegar a ser su desarrollo y el desconocimiento sobre esta condición.
La artritis reumatoide es una condición que puede ser confundida con otras dolencias musculares o articulares. Por eso debes aprender a diferenciar los síntomas y formas de tratamiento. En un artículo escrito para la versión impresa de la Revista Artritis y Reumatología, el Dr. Óscar Soto, médico especialista en reumatología, habla de los aspectos más importantes que debe conocer un paciente con AR.
Sobre la enfermedad
La artritis reumatoide es más frecuente en mujeres que en hombres. Suele manifestarse entre los 30 y 40 años de edad y puede provocar síntomas como inflamación, rigidez. “Es un dolor persistente, puede variar en intensidad, ser más fuerte al final del día. Viene acompañado de rigidez o entumecimiento matutino que dura cerca de una hora o más. Muy distinto a otros tipos de artritis en el que la rigidez dura de 10 a 15 minutos”. Así explica el Dr. Óscar Soto.
Además, “el dolor viene acompañado de hinchazón visible de la articulación, calientes al tacto y hasta un poco enrojecidas; lo que también hace una diferencia frente a otras patologías”. Esta enfermedad afecta las articulaciones de forma simétrica. Es decir, puede afectar las dos manos, dos rodillas, no solo una mano o una rodilla.
La artritis reumatoide no se hereda, existen factores genéticos que pueden aumentar la probabilidad de padecer de artritis reumatoide. Se habla de un gen llamado HLA-DR4 que puede aumentar el riesgo de padecer de esta enfermedad. Sin embargo, no es una condición hereditaria.
Otra de las cosas que deben tener en cuenta los pacientes con artritis reumatoide es que también pueden llegar a sufrir de anemia si sufren una inflamación por tiempo prolongado.
Frente al tratamiento el Dr. Soto asegura que “ciertamente desde que tenemos un diagnóstico hecho, lo primero que vamos a buscar es un medicamento que nos ayude a detener el progreso de la condición; para que la persona no tenga erosiones ni pérdida de espacio en las articulaciones”