Orthokine es una de las terapias más novedosas actualmente. Este es un tratamiento biológico que ofrece excelentes resultados para tratar principalmente la artrosis y también otro tipo de lesiones musculares.
Con ella se realiza un suero con una alta concentración de factores de crecimiento y proteínas antinflamatorias. Este líquido, que se inyecta directamente en la zona a tratar, servirá para regenerar de forma natural el cartílago de las articulaciones afectadas y así aliviar el dolor producido por el desgaste.
Este suero sanguíneo rico en factores de crecimiento y antiinflamatorios naturales, que se obtiene a partir de la sangre del propio paciente, por lo que es una sustancia muy bien tolerada, que no genera rechazos, y no tiene efectos secundarios, ni interacciones conocidas con otros medicamentos.
Esta técnica vanguardista resulta entonces menos invasiva y mejora la movilidad y reduce la inflamación y el dolor de forma superior a otras alternativas no quirúrgicas.
Estudios realizados
Actualmente existen más de 50 estudios clínicos publicados, alguno de ellos de nivel de evidencia científica I (doble ciego, aleatorio, controlado por placebo, con más de 100 pacientes en cada grupo), que avalan la eficacia y seguridad de la terapia Orthokine, tanto en humanos como en animales. Des de 2003 más de 100.000 pacientes han sido tratados en Europa sin que se haya producido ningún efecto secundario grave.
Cómo se realiza
Para realizar esta terapia se extrae sangre el paciente. Esta muestra, posteriormente se mantiene en incubación durante un período entre seis y ocho horas aproximadamente, de esta manera se logran estimular los glóbulos blancos que producen proteínas antiinflamatorias. Una vez finalizado este proceso, se inicia la centrifugación de la muestra, proceso en el cual se obtiene un suero sin células que contiene factores de crecimiento y propiedades antiinflamatorias.
La terapia consiste en inyectar en la zona afectada el suero que inhibe la inflamación, las irritaciones de la raíz nerviosa o lesiones en tendones y músculos. Según algunos especialistas, son necesarias entre cuatro y seis infiltraciones (máximo ocho).
¿Para qué pacientes está indicado?
El tratamiento con Orthokine está principalmente indicado en:
Artrosis (fases avanzadas)
Bursitis
Artritis reumatoide
Síndromes facetarios (sacros, lumbares, dorsales y cervicales)
La terapia Orthokine es efectiva para tratar la artrosis y también la medicina deportiva con el objetivo de favorecer la recuperación de lesiones en los tendones y roturas fibrilantes. La inyección mejora los resultados de una intervención quirúrgica y acelera la recuperación del paciente.
Beneficios
Es natural y no tiene efectos secundarios
Elimina el dolor durante más tiempo
Frena el desarrollo de la enfermedad
Es efectiva en los diferentes estadíos de la enfermedad
Consiste en un tratamiento sencillo
Así, la terapia Orthokine se ha convertido en una de las terapias más revolucionarias de la medicina regenerativa.