Artritis y Reumatología
El desgaste articular es un proceso que ocurre en todos los seres humanos. Éste puede acelerarse o disminuirse de acuerdo con ciertos factores, entre ellos el historial familiar y nuestros propios hábitos. De acuerdo con cifras de EE.UU. Cada año se realizan más de 400.000 reemplazos articulares, siendo los más frecuentes los reemplazos de rodilla y de cadera.
No siempre los reemplazos están condicionados por lo antes mencionado. De este grupo se excluyen a las personas con enfermedades reumáticas; especialmente aquella población en las que el adelgazamiento articular se desarrolla de manera acelerada. De hecho, los especialistas y reumatólogos siempre aconsejan a sus pacientes mantenerse alerta ante los dolores articulares, ya que los cartílagos (es decir, los encargados de amortiguar las uniones entre los huesos) no vuelven a crecer.
La mejor manera de evitar un reemplazo articular es la prevención, tanto si es una persona afectada por enfermades reumáticas o no. De acuerdo con la Fundación Patiente White para pacientes de artritis, estos son algunos consejos para mejorar el cuidado de las articulaciones.
3 consejos útiles y sencillos
- Evita el sobrepeso: Mantener el peso corporal acorde con nuestra talla, es el método más eficaz para prevenir un desgaste rápido de las articulaciones de las piernas. Cuando las articulaciones y extremidades deben aguantar más peso, los huesos pierden la fuerza y el agarre necesario. Recuerde “cuánto más pese, más presión deben aguantar sus articulaciones”.
- Realice actividad física de baja intensidad: El sedentarismo es una de las causas que provocan miles de enfermedades al año. En el caso de las condiciones reumáticas, mantener tonificados los músculos previene lesiones, pérdida de fuerza y funcionalidad. Incluso, los ejercicios de baja intensidad son altamente recomendados, ya que mantienen saludables los músculos sin dañar los cartílagos.
- Sea precavido: Sin duda, especialmente para las personas desde los 50 años, ser precavido en su día a día ahorra muchas visitas al hospital. Toma tu tiempo para hacer sus actividades, evita estar en constante estado de tensión (pues esto repercute negativamente en el sistema cardiovascular) y presta atención a los entornos en los que debas caminar,
- permanecer mucho tiempo de pie o transportarte.