Dado que las extremidades inferiores soportan el peso de todo el cuerpo es muy frecuente que se presenten lesiones o inflamaciones que, comúnmente, se manifiestan con un dolor persistente en la zona afectada.
Los problemas de rodilla pueden ser resultado de lesiones como caídas, accidentes automovilísticos, lesiones deportivas o enfermedades como la artritis. Sin embargo, también la gran mayoría de los problemas de la rodilla son causados al esforzar la rodilla al caminar o al realizar ejercicios repetitivos de alto impacto. Por ello, aquí le damos cinco consejos para aliviar el dolor en las rodillas:
Evite el sobrepeso
El sobrepeso afecta a todas las articulaciones del cuerpo. Un extra de 20, 30 o más libras de peso corporal pueden causar serios problemas en las rodillas y representar dolores muy fuertes. Por ello, trabajar en conseguir y mantener el peso adecuado dentro de un rango saludable, por medio de la adopción de una dieta baja en grasas, puede ayudarlo a evitar molestias en las extremidades inferiores.
Use los zapatos adecuados
Para evitar el dolor de rodilla es recomendable llevar el talón lo más bajo posible. El cuerpo puede tolerar un talón de aproximadamente una pulgada, por ello, es importante que evite el uso de tacones altos, debido a que éstos tiran el cuerpo hacia delante y hacen hincapié en las rodillas. Por otra parte, para hacer deporte es fundamental que use zapatos diseñados para tal actividad.
Compresas frías o calientes
Para reducir la inflamación use una compresa fría durante 30 minutos, dos o tres veces al día. También, puede usar una bolsa para microondas o una compresa caliente, en una temperatura de baja a media, y colocarla en la zona afectada durante 15 minutos. Asimismo, se puede llevar a cabo este tratamiento combinando paños calientes o fríos durante 15 minutos para reactivar la circulación y aliviar el dolor.
Ejercicios terapéuticos y estiramientos
Se ha comprobado que los estiramientos y los ejercicios terapéuticos pueden aliviar el dolor de rodillas. Por ello, evite tener una vida sedentaria y lleve a cabo rutinas saludables como caminar a su propio ritmo durante 30 minutos. También, puede practicar yoga, tai-chi u otra actividad física que le permita cuidar de sus rodillas.
Cuide su alimentación
Consumir las proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales que necesitamos lo es todo para mantener un cuerpo vigoroso, flexible y saludable, pero si además tenemos en cuenta aquellos alimentos que contribuyen al fortalecimiento de los huesos nuestras rodillas lo agradecerán. Así que, consuma alimentos ricos en calcio para combatir la osteoporosis y la artrosis.