La artritis reumatoide es una condición que continúa incrementando sus índices de afectados a nivel mundial, como se sabe las personas que más desarrollan esta malignidad suelen ser aquellas que están en edades avanzadas, lo que repercute fuertemente en su calidad de vida, además de su recuperación pues en algunos casos los tratamientos pueden mitigar el dolor pero no tratar al cien por ciento la enfermedad.
De acuerdo a un estudio por parte de la Universidad de Toledo, algunos investigadores y especialistas reumatólogos han encontrado lo que podría ser una vacuna para prevenir la manifestación de la artritis reumatoide, una noticia alentadora sobre todo para aquellos pacientes que presentan fuertes cuadros sintomatológicos a causa de la patología.
“A pesar de su alta prevalencia, la artritis reumatoide no tiene cura y no sabemos del todo qué la provoca. Esto ocurre con casi todas las enfermedades autoinmunes, lo que dificulta su tratamiento o prevención”, explica Ritu Chakravarti, autora principal del artículo, además agrega: “Si conseguimos llevar esta vacuna a la clínica, sería revolucionario”.
La especialista estuvo estudiando por un buen tiempo la proteína que interviene en la manifestación de afecciones autoinmunes como las reumáticas, la denominada 14-3-3 zeta, de acuerdo a estudios de la académica pudo establecer que la misma tiene un gran influencia en el sistema inmune y que podría desencadenar la artritis, al menos eso creía, sin embargo, una nueva investigación arroja que esta proteína es capaz de prevenir esta enfermedad.
De esta manera el equipo de estudio pudo establecer algunas características propias y modificó la proteína 14-3-3 zeta, estableciendo un modelo de vacuna prueba o placebo que podría prevenir el desarrollo de la artritis reumatoide y gracias a que el sistema inmune da una respuesta efectiva y rápida en el posible aparecimiento de esta enfermedad.
Para probar dicha hipótesis los especialistas realizaron pruebas en animales donde concluyeron lo que ya sabían, la efectividad y los resultados eran los esperados.
“Para nuestra sorpresa, la artritis reumatoide desapareció totalmente en los animales que recibieron la vacuna. A veces no hay nada mejor que la serendipia. Por casualidad dimos con un resultado erróneo, pero resultó ser el mejor. Ese tipo de descubrimientos científicos son muy importantes en este campo”, sostuvo la autora.
Además agregó: “Hace muchos años que no hacemos grandes descubrimientos para tratar o prevenir la artritis reumatoide. Nuestro enfoque es completamente diferente. Se trata de una estrategia basada en una vacuna con un nuevo objetivo que esperamos pueda tratar o prevenir la artritis reumatoide. El potencial es enorme”.
Se estima que la aprobación de dicho medicamento pueda ratificarse en el futuro, con el fin de que se pueda prevenir la artritis reumatoide sobre todo en algunos casos donde suele presentarse de forma agresiva y la práctica clínica cuente con más herramientas en la lucha contra patologías crónicas.
