Cada vez que mira el celular sus cervicales están sufriendo y puede que el dolor que siente en esta zona sea por causa de esto.
Cada día se puede consultar el celular unas 150 veces al día y cada vez que se realiza esto las cervicales están sufriendo, para evitarlo, es fundamental corregir hábitos y elevar el dispositivo en lugar de doblar el cuello.
Por qué el celular daña las cervicales
Las cervicales y la musculatura que las rodea están preparadas para sostener la cabeza, que pesa entre 4 y 6 kg. Pero una mala postura puede multiplicar ese peso.
Científicos estadounidenses han calculado el esfuerzo que supone mantener inclinada la cabeza para mirar el celular durante un largo rato y en el estudio, publicado por la revista Surgical Technology International, afirma que la tensión sobre cervicales y columna aumenta cuanto mayor es el ángulo de inclinación del cuello.
Es decir , que cuanto más doblamos el cuello, más sufre. Para que se haga una idea, con una ligera inclinación de 30 º las cervicales soportan una presión similar a si aguanta 18 kilos y si dobla el cuello unos 60 º, es como si soportara 27 kg.
Para evitarlo, los expertos aconsejan mantener el cuello recto y la cabeza erguida y elevará el teléfono a la altura de los ojos subiendo la mano en lugar de bajar la cabeza.
Dolor que puede causar
El dolor cervical se manifiesta en la parte posterior del cuello y puede llegar hasta la cabeza o los hombros, es capaz incluso de provocar dificultad para moverlos. Las molestias aumentan con la actividad y los gestos inadecuados y suelen cesar con el reposo y una buena higiene postural.
Si los síntomas no remiten tras corregir los hábitos o van a más, conviene consultar al médico, ya que el dolor cervical también puede deberse a la artrosis, o una hernia discal, que se produce cuando el disco amortiguador que hay entre las vértebras se rompe y sale hacia fuera, comprimiendo las raíces nerviosas.
En estos casos puede haber dolor y rigidez en el cuello, en los hombros, brazos, manos o dedos, con hormigueo, entumecimiento y debilidad muscular.
Tratamiento para el dolor cervical
Si bien los relajantes musculares son eficaces cuando las fibras musculares están contraídas, porque disminuyen el tono, relajan la musculatura y reducen el dolor, también es verdad que estos fármacos tienen múltiples efectos secundarios como somnolencia, debilidad, confusión, disminución de reflejos o dolor de cabeza.
Además los relajantes pueden crear cierta dependencia y no es recomendable usarlo más de 7 días, ni tomarlos por cuenta propia. Es importante que no abuse de los calmantes y compruebe en una visita médica, si hay algún trastorno detrás del dolor.
Otras posturas que debe evitar
Usar el celular es ahora una de las cosas que más se hace con frecuencia, pero hay otros gestos que se suelen hacer a diario, la mayoría de ellos de forma inconsciente que provocan que las cervicales pierdan su curva natural y que la musculatura de la zona tenga que hacer un sobreesfuerzo después para recuperar su posición original.
Esto puede causar dolor, tensiones y contracturas. Algunos de los malos hábitos más frecuentes son:
· Al hablar por teléfono: coger con la mano y no lo aguante entre la oreja y el hombro ya que fuerza una inclinación lateral del cuello.
· Caminar: evitar ir encorvado y mirando al suelo. Mantener la espalda recta y la cabeza erguida.
· El trabajo: si utiliza el computador, procurar tener la espalda apoyada en el respaldo de la silla y no inclinar la cabeza hacia delante.
· Ver televisión: siéntate de frente, ya que estar tumbado en el sofá lo obliga a girar el cuello hacia la tele, además, al apoyar la cabeza en el brazo del sofá está más elevada y las cervicales adoptan una curvatura forzada.
· Dormir: la mejor postura es de lado y con una almohada ni muy alta ni muy baja, para que las cervicales estén en línea con la columna vertebral. Si suele dormir boca arriba, elija una almohada fina para que la cabeza no esté demasiado elevada respecto del cuerpo.
Un trastorno muy común
Se estima que el 50 % de los españoles sufre dolor cervical y los principales culpables son la mala higiene postural y el estrés que provoca tensión en la musculatura del cuello y acaba tensionando.
Las siete vértebras cervicales forman la zona más frágil de la columna ya que además de sujetar la cabeza y permitir los cientos de movimientos que realiza el cuello a lo largo del día, entre ellas pasan todos los nervios que atraviesan el hombro y el brazo hasta llegar a la mano.
Por eso, cualquier desplazamiento o alteración de su posición natural puede provocar dolor y falta de movilidad en esta zona.