La donación de médula ósea es un procedimiento sencillo e indoloro como la donación de sangre y puede salvar a tantas vidas como te puedas imaginar.
La médula ósea es un material blando y esponjoso, que se encuentra en el interior de algunos huesos del cuerpo, como las crestas ilíacas (hueso de la cadera), el esternón o los huesos del cráneo.
Este tejido produce más de 200 mil millones de células sanguíneas nuevas cada día, incluidos glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Sin embargo en una gran cantidad de personas con enfermedad de la médula ósea y varios tipos de cáncer, este proceso no funciona como corresponde.
Usualmente para las personas con este diagnóstico un trasplante de médula es la mejor probabilidad de supervivencia y posible cura.
Estadísticas
A pesar de que la donación de médula ósea es un proceso sencillo como lo mencionamos anteriormente, la cifra no es tan factible como debería, pues sólo alrededor del 30 % de las personas que necesitan un trasplante pueden encontrar un donante compatible respecto a los HLA (Sistema del antígeno leucocitario humano)
en su familia inmediata.
Para el 70 % restante de las personas, los médicos necesitan encontrar una médula ósea compatible respecto de los HLA (Sistema del antígeno leucocitario humano) de otros donantes.
Trasplantes de médula ósea
En este proceso se reemplaza la médula ósea enferma por un tejido sano, normalmente suelen ser células madre que se encuentran en la sangre. Por ese motivo, a los trasplantes de médula ósea también se los denomina trasplantes de células madre.
Se le trasplantan al paciente las células madre de la médula ósea de un donante, estas células madre donadas pueden provenir de la sangre que circula por el cuerpo de otra persona o de la sangre de un cordón umbilical.
No obstante antes de que una persona reciba un alotrasplante (proceso en el cual células, tejidos u órganos son trasplantados de una persona a otra), es necesario encontrar un donante compatible con la tipificación del antígeno del leucocito humano (Human Leukocyte Antigen, HLA). Este análisis de sangre especial analiza los HLA, que son proteínas específicas en la superficie de los glóbulos blancos y otras células que hacen que el tipo de tejido de cada persona sea único.
Una médula ósea compatible respecto a los HLA tiene menos probabilidades de causar un posible efecto secundario del trasplante denominado enfermedad del injerto contra huésped (Graft vs. Host Disease, GVHD). En la GVHD, las células inmunitarias en el tejido trasplantado reconocen el organismo del receptor como extraño y lo atacan.
Quién puede donar
La probabilidad de éxito del trasplante de médula guarda una estrecha relación con la edad del donante. Cuanto más joven es, mejores resultados se obtienen. Esto ha provocado que, de forma progresiva, se vaya limitando la edad máxima de los donantes a los 40 años.
El donante voluntario deberá aceptar facilitar sus datos básicos y que éstos, junto a los de compatibilidad, sean incluidos en el Registro de Donantes de Médula Ósea (REDMO), que le sea extraída una muestra de sangre para estudiar sus características de histocompatibilidad, y que una pequeña cantidad de la misma sea guardada en el laboratorio para poder ampliar el estudio en caso de aparecer un paciente compatible.
La donación de médula ósea está contraindicada en personas que padecen determinadas enfermedades como:
- Tener recuentos de plaquetas inferiores a 120.000 ml.
- Hipertensión arterial no controlada.
- Enfermedad cardiovascular, pulmonar, hepática, hematológica u otra patología que suponga un riesgo sobreañadido de complicaciones durante la donación.
- Diabetes mellitus insulinodependiente.
- Obesidad mórbida.
- Malformaciones del cuello o la columna vertebral.
- Posibles alergias a los anestésicos.
- Déficits enzimáticos familiares.
- Enfermedad tumoral maligna, hematológica o autoinmune.
- Infección por virus de la hepatitis B o C, virus de la inmunodeficiencia adquirida.
- Algún factor de riesgo de SIDA.
- Haber sido dado de baja definitiva como donante de sangre.
- Tener antecedentes de enfermedad inflamatoria ocular (iritis, episcleritis) o fibromialgia.
- Tener antecedentes o factores de riesgo de trombosis venosa profunda o embolismo pulmonar.
El proceso de donación de médula ósea
Si aceptas donar médula ósea, es probable que te realicen un proceso que se denomina, recolección de células madre de sangre periférica (peripheral blood stem cells, PBSC).
La donación de médula ósea se realiza extrayendo con una jeringuilla, una pequeña cantidad de sangre medular de la parte posterior del hueso de la cadera, esta extracción se realiza bajo anestesia general o epidural.
Ahora bien, la obtención de células madre periféricas requiere administrar al donante 4 o 5 inyecciones subcutáneas de unas sustancias denominadas factores de crecimiento hematopoyético, que hace que las células madre de la médula ósea pasen a la sangre. Esta donación no requiere anestesia.
Las personas que no cuentan con un familiar que sea compatible pueden encontrar a alguien a través de un registro de médula ósea. El más grande se llama Be the Match (bethematch.org). Allí se registran personas que están dispuestas a donar médula ósea y su información se almacena en una base de datos.